Los manifestantes también protestan frente a la legación de Francia.- Acusan a estos países de interferir en los asuntos internos
Durante una comparecencia en el senado en Roma, Frattini ha explicado que los manifestantes, que iban "vestidos de civil", como es habitual entre losbasiyís, gritaron proclamas como "Muerte a Italia, muerte a Berlusconi" y que cuando trataron de asaltar la embajada, la policía iraní logró evitarlo,informan medios italianos . Frattini ha dicho que también se han registrado manifestaciones en otras legaciones diplomáticas, que no especificó.
Fuentes diplomáticas europeas han informado de que los manifestantes se dirigían también hacia las legaciones de Alemania y Holanda, lo que provocó el despliegue de efectivos policiales. Sin embargo, los basiyís se han disuelto antes de llegar a estas sedes.
Las embajadas de Francia e Italia están ubicadas en dos edificios contiguos de la calle Neauphle-le-Château, en el centro de la capital iraní. Como todas las representaciones extranjeras cuentan con la protección de agentes de la policía diplomática. Además, unos bloques de hormigón impiden el aparcamiento en la acera colindante.
Según la agencia Fars, los manifestantes eran estudiantes de la Universidad de Teherán que han coreado eslóganes como "muerte a EEUU", "muerte a Reino Unido" y "muerte a los monafegh", un término que literalmente significa hipócritas, pero que tiene graves connotaciones en la República Islámica, ya que es como se conoce a los disidentes del grupo Muyahidin Jalq, pero desde el pasado verano se está utilizando para quienes contestan la releección de Mahmud Ahmadineyad, con el fin de descalificarlos. Como es habitual en este tipo de actos, los participantes portaban imágenes del ayatolá Jomeini y banderas de la República Islámica.
Esta protesta se produce en víspera de sendas manifestaciones convocadas para este jueves, cuando Irán celebra el 31 aniversario de la Revolución Islámica. El país se ha visto sacudido por numerosas protestas desde el pasado junio, cuando en unas elecciones calificadas de fraudulentas por la oposición, fue reelegido el presidente Ahmadineyad. La represión que ha ejercido el régimen contra la oposición ha desembocado en cientos de detenciones de políticos, estudiantes y periodistas, despertando la condena de la comunidad internacional.
Asimismo, Estados Unidos y la Unión Europea están apurando la aplicación de nuevas sanciones económicas contra la República Islámica por sus intenciones de enriquecer uranio al 20% en su territorio, echando por tierra un posible acuerdo en materia nuclear.
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"Fuera Roma", primer socio comercial de Teherán
El ministro de Exteriores iraní ha convocado al embajador italiano en Teherán, Alberto Bradanini, para transmitirle su protesta formal contra las palabras pronunciadas por Silvio Berlusconi en la Knesset durante su reciente visita a Israel, informa la agencia Ansa. Según ha afirmado en el Senado el ministro de Exteriores italiano, Franco Frattini, Roma dio instrucciones a su embajador para que no asista el jueves a la celebración oficial del aniversario de la revolución islámica de Jomeini.
Frattini ha anunciado que otras cancillerías europeas como Londres y Bonn estudian ausentarse también de los fastos para enviar una suerte de observador diplomático.
La tensión entre Italia e Irán ha subido muchos grados tras la polémica y reciente visita de Berlusconi a Israel. Teherán afirmó el domingo a través de la televisión oficial que Italia está "al servicio de los señores israelíes" después de que el primer ministro italiano definiera ante Benjamin Netanyahu el ataque israelí a Gaza como un "acto justo" de represalia (para equiparar ese mismo día en Belén ante Mahmud Abbas a las víctimas del Holocausto con las de la franja).
Berlusconi afirmó además en la Knesset que algunos dirigentes actuales, en referencia a Mahmud Ahmadinejad, "recuerdan a personajes infames del pasado" (en evidente alusión a Adolf Hitler). Pero Teherán está sobre todo molesta porque Berlusconi afirmó que el deber de Italia es "sostener y ayudar a la oposición" en la República Islámica, y quizá porque, durante su viaje, Israel pidió a Berlusconi que reduzca sus relaciones comerciales con Irán.
Pese a la retórica desplegada en Jerusalén, Italia sigue siendo el primer socio comercial del régimen islamista. Tras rebasar a Alemania en 2006, el volumen total de negocio bilateral superó en 2007 los 6.000 millones de euros. Y en los primeros seis meses de 2009, Roma mantuvo el liderazgo al exportar bienes y servicios por 894 millones (datos del Istat).
En este momento, un millar de empresas italianas comercian con Irán, comandadas por gigantes energéticos, de la automoción y la siderurgia como Eni, Fiat-Ansaldo, Technimont o Danielli-Duferco. La crema del capital italiano, de Mediobanca a Telecom, Capitalia, Montedison o Falck, sigue presente en el país. Todo ello ha llevado al diario israelí Debka File (cercano a círculos del Mossad) a afirmar: "El comercio entre Italia e Irán prospera, y sostiene el programa nuclear de Teherán".
MIGUEL MORA | Roma
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